Día tranquilo, post Menorkos. Paso gran parte del día hablando con gente próxima, intentando por fin encontrar un buen sitio donde poder pintar, todos mis intetnos anteriores no me han llevado a buen puerto.
Paseando y preguntando consigo un par más de nuevas referencias de posibles lugares, en Intendete, hay una pequeña residencia de artistas, voy a visitarla. En unos días tendrán algun espacio disponible, me lo enseñan, es perfecto, buena luz, con una amplia ventana con vistas a Mouraria. Quedamos en que me enviarán un mail con las condiciones...
tanto pensar en pinturas, pinceles y calaveras me entran unas ganas locas de ponerme a trabajar, así que marcho al hostel a intentar hacerme un hueco entre conversaciones en inglés, ok, me faltan algunos materiales así que vuelvo a salir, en Barrio Alto hay una pequeña tiendecita de material de bellas artes, entro, una amable señora me atiende, cada cosa que cojo, sea un lápiz, un pincel o un pequeño bote de pintura, lo envuelve de manera meticulosa, cada cosa por separado, haciendo paquetitos de papel marrón, al irme aún me regala dos pinceles. Gracias.
Booka Shade en los altavoces, referente elegido, soporte y material, todo listo. Empiezo a pintar algunos trazos, no me hacen falta más para darme cuenta de que no es en el mejor entorno donde he pintado, incluso haciéndolo en la calle tienes menos interrupciones, esto me anima a seguir buscado algo mejor, sigo pintando un par de horas más y doy la sessión por finalizada.
Antes de acostarme decido dar una vuelta nocturna, paseo solitario y reflexivo, ni los insistentes vendedores de hash rompen la coraza de pensamientos.
Paseando y preguntando consigo un par más de nuevas referencias de posibles lugares, en Intendete, hay una pequeña residencia de artistas, voy a visitarla. En unos días tendrán algun espacio disponible, me lo enseñan, es perfecto, buena luz, con una amplia ventana con vistas a Mouraria. Quedamos en que me enviarán un mail con las condiciones...
tanto pensar en pinturas, pinceles y calaveras me entran unas ganas locas de ponerme a trabajar, así que marcho al hostel a intentar hacerme un hueco entre conversaciones en inglés, ok, me faltan algunos materiales así que vuelvo a salir, en Barrio Alto hay una pequeña tiendecita de material de bellas artes, entro, una amable señora me atiende, cada cosa que cojo, sea un lápiz, un pincel o un pequeño bote de pintura, lo envuelve de manera meticulosa, cada cosa por separado, haciendo paquetitos de papel marrón, al irme aún me regala dos pinceles. Gracias.
Booka Shade en los altavoces, referente elegido, soporte y material, todo listo. Empiezo a pintar algunos trazos, no me hacen falta más para darme cuenta de que no es en el mejor entorno donde he pintado, incluso haciéndolo en la calle tienes menos interrupciones, esto me anima a seguir buscado algo mejor, sigo pintando un par de horas más y doy la sessión por finalizada.
Antes de acostarme decido dar una vuelta nocturna, paseo solitario y reflexivo, ni los insistentes vendedores de hash rompen la coraza de pensamientos.
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